Su Instructor

Muchos reconocemos el nombre de Mak-Astro o MA, pero pocos conocen a la persona detrás del nombre. Todos admiramos su carácter recto y solidario. Pero también, su forma simple de explicar las cosas complejas del mundo pastelero moderno y tradicional.

Mak-Astro se relacionó con el arte de la pastelería a muy temprana edad. Ya que su padre, Ramon junto a sus hermanos, eran propietarios de una popular pastelería en la ciudad de Santo Domingo. Mak creció en el barrio de Cristo Rey y estudió en el colegio San Pablo Apóstol.

Sus padres siempre le celebraron su imaginación y ocurrencias, en especial cuando Mak los sorprendía con algún bizcocho (Pastel) confeccionado en lodo (arcilla). Recuerda él, “yo utilizaba el lodo del patio de la casa para hacer bizcochos, pastelitos y todo lo que veía que se hacía en mi casa”.

A los 13 años, Mak ya pudo hacer sus pasteles reales y trabajaba en la pastelería a tiempo parcial junto a un gran número de primos y tíos. “Recuerdo que mi padre no dejaba que se me pagara, hasta tres años después, cuando mi tío lo convenció, ya que que yo trabajaba más y lo hacía muy bien”.  Mak Astro recuerda que él aprendió muchas técnicas de su familia, pero que fue su tío, Jovino, quien lo tomó como discípulo y le enseño las técnicas avanzadas de la época. Jovino fue un reconocido chef pastelero en los años cincuenta. “Mi tío siempre me ayudaba y me mostraba cómo obtener un mejor producto, tenía su forma peculiar de enseñar, que al día de hoy no olvido”.

Un día, una monja española, que siempre visitaba la pastelería, lo invitó a ir a su taller para que le mostrara como trabajar con suspiro (merengue italiano). Durante la visita, Mak observó un castillo hecho en azúcar, lo cual le llamó mucho la atención. Él le pidió a la religiosa que le enseñara a cómo trabajar esa técnica, la monja no dudo de la capacidad del joven, y en muy pocas lecciones, Mak ya dominaba y añadía sus propias ideas a la técnica del “Royal Icing”, Mak-Astro tenía entonces 15 años de edad.

En 1970 Mak-Astro fue contratado para hacer un bizcocho para la embajada de los Estados Unidos en celebración del Día de Gracias, el pastel tenía siete plataformas. Ese trabajo tuvo mucho éxito y fue de muy buena aceptación.

Mak-Astro comienza a destacarse en el mundo del azúcar y muchas entidades empiezan a solicitar sus servicios. Transcurría el tiempo y Mak-Astro es llamado a formar parte del equipo del Chef Mike Mercedes, quien dirige entonces la Cena de Gala para los Reyes de España. Mak-Astro tuvo bajo su responsabilidad la creación de los postres en aquel evento. Siendo la cena todo un gran éxito, el Chef y su equipo fueron muy agasajados, en especial por el agrado que causaron los postres. Desde entonces Mak-Astro seria parte importante en varias cenas de estado y eventos internacionales.

En 1977 Mak-Astro llega a los Estados Unidos estableciéndose en el condado de Queens. Mak  realiza estudios en Boricua College y Baruch College. Como todo inmigrante, Mak empieza a trabajar y en tan solo 18 meses abre su propio negocio.

Durante muchos años Mak-Astro ha brindado sus servicios a entidades privadas y públicas en Estados Unidos, pero se le reconoce por sus servicios a la comunidad y la calidad de su trabajo.

En el 2005, Carmina Ochoa, su compañera de 15 años, le propone el impartir clases de pastelería y Mak acepta. Ya Mak Astro había impartido un gran número de seminarios y talleres, pero ninguno diseñado y producido enteramente por él mismo.

A MA o como le llaman sus estudiantes ahora, Mak-Astro, se le conoce por su forma única y peculiar de instruir. “yo tuve grandes maestros, yo he aprendido mucho de gente que enseñaba con amor, ahora es tiempo de devolver parte de ese amor”.